Las exportaciones de alimentos y bebidas del Reino Unido a la UE están en caída libre.
Fue según nuevas cifras publicado este mes por la Federación de Alimentos y Bebidas, que muestra que las exportaciones a la UE han caído más del 27% en el primer semestre de 1 en comparación con el mismo período hace dos años. En general, los ingresos perdidos ascienden a alrededor de 2021 millones de libras esterlinas.
Las exportaciones a España, Italia y Alemania se han reducido casi a la mitad.
Sin embargo, algunas categorías de exportación todavía están experimentando un crecimiento. Las exportaciones de whisky, refrescos y salmón han aumentado. Y aunque la caída de la actividad de exportación a la UE ha sido marcada, la pérdida total de ingresos por exportaciones se ha visto amortiguada por un aumento de las ventas fuera de la UE del 13 %. Como resultado, la proporción de las exportaciones del Reino Unido que se mueven fuera de la UE ahora ha aumentado del 40% al 47%.
Dominic Goudie, director de comercio internacional de la FDF, comentó que: “La vuelta al crecimiento de las exportaciones a mercados fuera de la UE es una buena noticia, pero no compensa la desastrosa pérdida de 2 millones de libras en ventas a la UE.
“Al mismo tiempo, estamos viendo escasez de mano de obra en toda la cadena de suministro de alimentos y bebidas de la granja a la mesa del Reino Unido, lo que genera espacios vacíos en los estantes de las tiendas del Reino Unido, interrupciones en las entregas y disminución de la producción. A menos que se tomen medidas para abordar estos problemas, la capacidad de las empresas para cumplir con los pedidos de exportación vitales se verá afectada”.
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John Whitehead, de la Asociación de Exportadores de Alimentos y Bebidas, dijo que hay una serie de factores en juego, incluidos los desafíos en la cadena de suministro y la incapacidad de reunirse con los clientes en persona debido a la pandemia.
“Cada vez hay más pruebas de que la complejidad del comercio con la UE ha llevado a las empresas a trasladar sus operaciones a Europa y a los importadores a buscar proveedores alternativos, lo que contribuye al declive continuo tanto de las exportaciones como de los puestos de trabajo en el Reino Unido”.